"Cocón" sobrenombre que recibe él y su familia, es una bella metáfora de lo que llegaría a ser y de lo que llegaría a hacer. Un cocón es un nacimiento de agua entre rocas, en tierra árida y seca, una luz en la oscuridad, vida entre la desolación.
El cortijo de "Los Cocones" está en lo alto de una loma, sometido a la interperie y bajo unas condiciones duras para la vida y para la labranza.
La historia de D. Juan Reche y Reche es también la historia de su familia, es la historia de la superación, de la lucha y del progreso.
Siendo aún un niño, su padre vende el cortijo de los "Cocones", para comprar las tierras y un cortijo en otra zona de Oria "EL Chaparral", más llana, más rica y más productiva para la agricultura, forma de vida de la familia Reche y Reche.
Ese continuo progreso, instinto de superación y mejora en sus condiciones de vida terminó llevando a la familia Reche y Reche a Somontín, pueblo rico por sus recursos e industria mineral y cuyos impuestos y arbitrios eran muy inferiores a los del resto de los pueblos de la zona.
Fue en esos momentos cuando D. Juan Reche y Reche toma contacto directo con los sectores sociales más relegados y explotados del pueblo, y se despierta en él, un auténtico compromiso social y el inicio de la lucha por mejorar y dignificar a los trabajadores y a las familias de un pueblo rico que vive en la miseria.
